La celulosa es muy abundante en la naturaleza y puede obtenerse de muy diversas fuentes renovables. Además de la celulosa procedente de la madera, la industria papelera está hoy utilizando también fibra procedente de la leche, los pastos, el cuero o la cáscara del cacao.
No hay tampoco límite a los potenciales usos de la fibra de celulosa procedente de la madera. El papel es el perfecto sustituto, natural y renovable, de materiales procedentes del petróleo: biocomposites de fibra de celulosa, productos hi-tech moldeados, extrusionados o ensamblados a partir de componentes, más ligeros, y procedentes de una fuente renovable como la madera.
Hoy, el mercado y los consumidores demandan más que productos: quieren soluciones. En el campo de la electrónica impresa y de la nanotecnología, la industria papelera europea ya está desarrollando soluciones innovadoras: circuitos electrónicos completos o etiquetas RFIB impresas en papel, aislantes de nanocelulosa…
El packaging tiene un papel cada vez más importante en las decisiones de compra del consumidor e incorpora funciones de comunicación y protección cada vez más sofisticadas. Con diseños innovadores y soluciones de conectividad, el Packaging de papel y cartón es la respuesta sostenible a las nuevas demandas del mercado. El embalaje para productos electrónicos con alas protectoras, el embalaje antihumedad, los palés de cartón, la multicaja para la compra online, nuevas soluciones para botellas y latas o el saco de cemento que desaparece son solo algunos ejemplos.
Para hacer nuestra vida más fácil y confortable, la industria papelera desarrolla productos renovables, reciclables y biodegradables con prestaciones únicas e innovadoras. El papel higiénico que limpia las tuberías, el envase que enfría el champán o el cava, el cartón con una capa de carbón activo que absorbe olores y protege contra la migración de sustancias no deseadas…
Un amplio panorama de innovadores productos de papel y cartón que nos muestran que la era de la celulosa ha comenzado: no hay límites para la celulosa y el papel en esta nueva era post-petróleo.
La bioeconomía es ya una realidad.